Cómo será el futuro luego del control de la pandemia?

Un regreso a la normalidad como era la vida a principios de 2020 todavía está muy lejos.   Sin embargo, aun cuando se alivien las restricciones impuestas para hacer frente a la pandemia de covid-19, el coronavirus seguirá afectando nuestras vidas de muchas maneras.  Enumeramos algunos de los aspectos con mayor impacto, que perdurarán:

 

EL USO DE LA TECNOLOGÍA.

Con el cambio al teletrabajo y las escuelas, colegios y universidades cerradas, muchas de las aplicaciones comunes que teníamos a mano se volvieron más necesarias y aparecieron otras que ya se nos hacen fáciles y rutinarias.

Ya nos definimos como dependientes de la tecnología; con ella logramos socializar con familiares, amigos y colegas y cumplir con el distanciamiento social obligatorio.  Estar más tiempo con nuestros familiares cercanos y disfrutar de actividades que aplazamos por estar fuera de casa o en el tráfico de las ciudades.

Se incrementó el uso en compras a domicilio y se aceleró la bancarización digital.  Queda pendiente el mejorar la seguridad cibernética y la racionalización del tráfico de datos para no sobrecargar las redes.

 

LOS HABITOS Y LAS PRIORIDADES.

Un sector que ha sido muy afectado es el comercio minorista.  ¿Cuántos de estos almacenes volverán a abrir? La falta de liquidez y su capacidad limitada para reinventarse con los cambios vertiginosos y estructuralmente difíciles quizás no les permita sobrevivir.

Solo las empresas con algo más de recursos financieros, que puedan idearse la manera se seguir activos comercialmente y aquellos que reciban oportunamente auxilios y ayudas por parte de los gobiernos, podrán resistir y reaparecer en la reapertura de mercados.

Sn embargo, dependerán de cuántos de sus compradores siguen con dinero para abastecerse de aquellos bienes que no sean catalogados como básicos o necesarios, pues esos serán los que de primera mano irán a adquirir.  Inclusive jocosamente se dice:  “las mujeres han sobrevivido sin comprar ropa”

 

LAS OFICINAS Y LOS ESPACIOS DE TRABAJO.

Se ha probado que el teletrabajo funciona, que la conectividad es posible, segura y efectiva, que hay labores que no requieren de una infraestructura locativa especial, y que el manejo del tiempo es relativo.

El reto a futuro es que las empresas se pregunten si es necesario hacer que sus empleados se desplacen hacia las oficinas por distancias enormes, en un transporte públicos abarrotados y que compartan un espacio de trabajo en instalaciones que puedan no ser seguras.

Saliendo del efecto covid-19, las empresas se enfrentarán entonces al gran reto de cómo remodelan y cuánto invierten en sus oficinas, para adecuarlas según los protocolos de bioseguridad específicos de su sector y recibir al personal que antes trabajaba desde casa.  Algunas de las empresas quizás llegarán a decidir en invertir lo menos posible impactando el crecimiento general y en particular del sector que provee esos servicios de infraestructura.

Lo más positivo quizás, es la transformación digital que permanecerá o se hará más rápidamente y la logística de comercialización que será una cadena de suministro más corta y eficiente.

 

EL TRANSPORTE.

Es otro de los sectores que saldrá más afectado, luego de la pandemia.  Puede que algunas compañía de aviación puedan superar la crisis pero solo se recuperarán en mucho tiempo.  El uso de las videoconferencias y los negocios y personas con baja liquidez, hará que la recuperación del sector sea a muy largo plazo.

Las terminales de transporte (aero, terrestre y marítimo)  implementarán procesos para mantener el distanciamiento social e instalarán los equipos necesarios y suficientes para el control de la temperatura corporal de los pasajeros.

Los sistemas de transporte como la bicicleta, las patinetas, se volverán más populares y se incentivará el uso del automóvil y las motos.

Los precios indudablemente subirán pues los servicios de transporte deberán modificarse a menos plazas y una vez sea reabierto el servicio no habrá mucha demanda a pesar que luego de semanas de estar encerrados, muchas personas estarán ansiosas de viajar.

 

LAS CLASES VIRTUALES.

Según UNICEF, el 90% de los estudiantes del mundo reciben clases de manera virtual durante las restricciones tomadas por los gobiernos de todo el planeta, debido a la pandemia.  Ningún país del mundo tiene cubrimiento al 100% digital de su territorio;  casi un 59% de los estudiantes tiene acceso a un computador o tableta y solo un 63 % tienen un teléfono inteligente.  Un “pobre” 40% de los profesores emplean recursos virtuales o conocen la conectividad para enseñar.

Las emisiones de radio y televisión estatales han implementado frecuencias adicionales en el dial o abierto espacios en su programación habitual para facilitar la emisión de clases y lecciones específicas.  Incluso, algunas compañías de televisión satelital han abierto en su parrilla de programación canales educativos para servir a zonas apartadas, sin cubrimiento de internet. En el caso de América Latina, los países aprovechan plataformas y sesiones de clases de otros países, para ser retransmitidos a sus estudiantes.

Este cambio causará un sin número de efectos en la calidad y cantidad de educación impartida en el mundo además de marginar mucho más a la población vulnerable.  La variación de ritmo de un día escolar normal, por las lecciones, campanas y recreos también tendrá un efecto significativo en los comportamientos de los infantes y los adolescentes, que aún no ha empezado a evaluarse porque las clases virtuales continuarán.

Las intenciones de estudiar lejos de casa podrán verse afectadas a mediano y largo plazo y podrá ser sustituida cada vez más con alianzas para estudiar a distancia, afectando los ingresos de las Universidades que tenían en la educación formal y no formal de estudiantes extranjeros una opción para mejorar sus ingresos.

 

LOS COMBUSTIBLES FOSILES.

Un aire limpio y carreteras tranquilas es el resultado a los confinamientos de las comunidades.  La disminución significativa de las emisiones de CO₂ ha permitido que disminuya una gama de condiciones clínicas de enfermedades respiratorias.  Tangencialmente, los bajos niveles de ruido ambiental han favorecido que los animales de campos y reservas naturales, traspasen las barreras físicas y exploren rutas que los llevan a las casas de zonas rurales, sin temor a los seres humanos.

Será el momento de retomar la agenda sobre el  cambio climático y continuar reduciendo los gases contaminantes, la acumulación de basuras y los efectos del calentamiento global. Es el momento de fomentar el uso de energías limpias y establecer políticas de sostenibilidad ambiental y eficiencia energética tanto en hogares como en industrias.

No es posible regresar al consumo desenfrenado de los combustibles fósiles ni dejar que ese consumo sea aprovechado por los gobiernos para recuperar un tanto el dinero “invertido” en las ayudas humanitarias durante la pandemia.

El secretario general de la Naciones Unidas insinuó en una reunión, que así como los gobiernos han demostrado que pueden actuar cuando es necesario y la voluntad de las poblaciones es responder, este comportamiento debería ser el mismo frente a la “emergencia más profunda” del ambiente.

¡¡Esperemos que así sea!!!

 

LOS DEPORTES.

Los aficionados a los deportes, viven momentos “trágicos” porque sus fines de semana cambiaron radicalmente.  La falta de las audiencias, la perdida de los derechos sobre las emisiones televisivas, la ausencia de la imagen de las ropas deportivas, entre otras, que proveen millonarios recursos a los equipos, hacen que miles de empleos directos e indirectos se perdieran en consecuencia.

Los deportes son un placer serio para muchos.  Para casi todos los aficionados son “cuestión de vida o muerte” frase del legendario director técnico del Liverpool Bill Shankly.  El aplazamiento de las Olimpiadas y la cancelación de otras tantas pruebas ciclísticas, de tenis, de atletismo, etc. han traumatizado a muchos.

En el futuro, los llamados deportes de contacto se enfrentan a cómo serán implementados protocolos seguros tanto para los jugadores como para el público asistente al espectáculo.  En general, ¿Cómo podrán los deportes de contacto físico continuar?   Inclusive, jugar partidos a puerta cerrada presenta innumerables problemas.

Los deportes se puedan reactivar este año, con la recesión global que probablemente se nos viene encima, seguramente afectará la industria durante años, especialmente en las áreas de pagos de transferencias, salarios, acuerdos de retransmisión y premios en dinero.

Por ahora, para los jugadores se han recortado los salarios y siguen rutinas de mantenimiento en sus sitios de residencia para no perder sus estados físicos que también demorarán en estar a punto para competir.

 

LAS ACTIVIDADES DE ENTRETENIMIENTO Y CULTURA

Hay dos versiones diametralmente opuestas sobre el futuro de las actividades culturales y sobre cómo responderá el público ante la posible oferta de ellas.

Unos críticos creen que, con base en que muchos actos, espectáculos y museos se han emitido de manera gratuita por internet al mundo durante los confinamientos obligatorios, será muy difícil que se disminuya significativamente la oferta futura o que desaparezca esta forma de darse a conocer.  Aun así, piensan que con algún costo razonable, seguirá siendo una alternativa abierta para el cual habrá suficiente público.

También se cree que no serán viables los grandes teatros y centros artísticos donde el distanciamiento social no es factible y con elencos y guiones que exijan grandes presupuestos.

Los otros críticos, un poco más optimistas, piensan que los formatos que antes se ofrecían de obras en sitios más pequeños, con un número de artistas limitado se verán favorecidos, aún con precios de boletería elevados, porque hay un público ávido de asistir a espectáculos.  Asumen que los contenidos de las obras tendrán que ser muy llamativos, divertidos y excelentemente llevados a la escena, para que la asistencia sea efectiva.  Con el proyecto de hacer grabaciones y retransmitir por medios de comunicación y obtener los recursos con la venta de las emisiones.

Las galerías de arte se demorarán más en reactivarse pues, aunque no reciben público de forma masiva, la inversión en arte estará limitada por la capacidad adquisitiva de quienes asisten a ellas.

La televisión y la radio, ahora exitosas por acompañarnos a todos en casa, seguirán siendo las ganadoras, inclusive repitiendo sus programas, mientras logran obtener nuevo material.

 

LAS COMUNIDADES DE VECINOS.

Las dificultades económicas pondrán presión a los vínculos sociales. Esa es la verdadera prueba para nuestra sociedad local: el vecindario.

¿Podremos mantener nuestro genio durante el confinamiento?, ¿Podremos calladamente reparar el tejido social en tiempos difíciles?».  El temor que nuestras normas de comportamiento queden infectadas por la angustia y la adversidad y que emergeremos más egoístas y menos unidos, nos llena de confusión.

Mantener la resiliencia, prudencia, humildad, ética de trabajo y sentido del deber, se dice que colabora a que el confinamiento desate un ánimo de buena vecindad y que  este permanecerá aún  mucho después de que se levante la orden de aislamiento.

Sin embargo, podría estar incubándose también cuestionamientos profundos a la solidaridad y atención social y a los esquemas de protección laboral.

 

LA SOLIDARIDAD SOCIAL.

Indudablemente las poblaciones en situación de vulnerabilidad serán las más afectadas por la pandemia.  La situación es más grave siendo éstas las poblaciones marginadas y desplazadas por las difíciles situaciones sociales de cada país.

Una vez iniciada la emergencia sanitaria y a lo largo de las primeras etapas, toda la atención se centra en el sistema de salud. Si bien es cierto que el sistema no puede colapsar, la emergencia hace a la problemática social una bomba de tiempo.  Los gobiernos responden rápido si los dirigentes entienden que la afectación por el coronavirus es seria, será costosa y durará mucho tiempo.

Las agencias del estado y los fondos de solidaridad creados trabajan sin descanso repartiendo las ayudas.  La empresa privada aporta con donaciones en especie y dinero, que se suma a los subsidios y refinanciaciones que entrega el estado a todos los sectores de la economía.  Finalmente es el estado el que avalará con su estabilidad, las concesiones otorgadas a la economía.

La escasez de elementos de protección para el personal de la atención en salud, la afectación a la salud mental por el confinamiento, el aumento de la violencia intrafamiliar, son algunos de los problemas que despiertan la sensibilidad social de la comunidad.  Sin embargo lo que más “duele” a la sociedad es que los adultos mayores son el grupo que más muere con los síntomas de la enfermedad y no se conoce bien cuáles serán las afectaciones en la salud de los que se recuperan ni cuándo sanarán las personas que aún siguen enfermas.

 

EL COMERCIO INTERNACIONAL.

La pandemia reveló que el proceso de la globalización genera un desequilibrio en las cadenas de suministro internacional, que aunque es ventajosa por tener precios bajos, genera desempleo en occidente cuyo nivel de vida es más alto.  La economía estaba regida por las decisiones y manejos entre Estados Unidos de América., China y Alemania.  Ahora, se privilegiarán las empresas locales para que las cadenas productivas sean más cortas y diligentes.

A futuro, nuevamente los países como Vietnam, Etiopía y Bangladesh, junto con China mismo, volverán a ser los centros de producción por tener mano de obra barata.  Hoy día, las plantas chinas están volviendo a entrar en operación, pero nadie compra pues con los clientes en confinamiento, el comercio ha caído y quedará reducido a lo que se “haga” en el último trimestre de este año.

La clave de la recuperación será crear empleo y mantener los costos de vida bajos. Lo primero significa que los gobiernos volverán a ver a China como socio comercial.  Lo segundo, significa que el nivel de vida deberá adaptarse.

 

Para tener en cuenta

Muchos otros temas quedan por evaluar.   Por ahora la lenta reactivación de los sectores productivos y comerciales se está dando en muchos países, para intentar recuperar a trabajadores y empleadores de la crítica situación económica que tenemos.  Todo sin perder de vista la situación de la pandemia.

Incluimos dos enlaces con la visión de la Organización Mundial del Comercio (OMC) https://www.wto.org/spanish/tratop_s/covid19_s/covid19_s.htm y   de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos y Organización de las Naciones Unidas (OCDE) http://www.oecd.org/coronavirus/es/ que ilustran los panoramas en futuros mediano y a largo plazo.